lunes, 23 de abril de 2007

Reporting a missing person


Hace mucho que no sabemos nada de Pochi.


Pochi buscaba novio. Y Pochi lo encontró. Un ser 100% patético y dependiente, tal como ella. Su otra mitad, su media naranja o, más acertadamente, su peor-es-nada. Porque antes que seguir acostándose con pibes que no la valoraban y le escapaban como al Katrina, ella manoteó a su "Die".


Y, así, se las picó. Abandonó a sus amigas porque ahora Pochi sale con Die y otras parejitas empalagosas. Seguro se juntan a cenar todos los viernes, después, toman un cafecito y, cuando se ponen muy locos, se alquilan un VHS y comen pochoclos.


La mamá de Pochi está contenta porque su hijita secotaquenohaceunchisteniquelepeguen ya no se junta con nosotras, sus ex amigas loquitas. Si supieras, mamá de Pochi... tu chiquita era ligera como Silvia Suller, pero con esa carita de nada parecía una santita. Repito, parecía.


Pero, ahora Pochi casi convive y se presenta con un "Yo estoy muuuuy bien", con ese tonito de Mechupaunovariosiavostevacomoelculo.


Cuando bailábamos "raro" (según ella) con Sarah, nos retaba: "Ay, chicas... me dan vergüenza" y nosotras, por supuesto, nos esforzábamos por contorsionarnos de la manera más llamativa sólo para sacarla de sus casillas.


Pochi no abre mucho la boca cuando habla, como si siempre estuviese apretando los dientes y dejando escapar palabras apretadas, agrias, aburridas. Pochi es una chica que no dice malas palabras, vomita sin emborracharse, tiene problemas de presión alta y un único tema de conversación: su Die.


No sé en qué más andará Pochi en estos días y ¿la verdad? Tampoco me importa.

1 comentario:

Anónimo dijo...

ja ja ja ja Pochi encontro un sillon a su medida!
Se siente comoda con Die!
je je
SIRE